mientras el corazón de aquella niña se desangra.
Somos complices de un amor en secreto, con la magia de lo imposible y el veneno de lo prohibido.
Somos el pasado que fue, el presente que es, y un futuro que no existe. Somos nada, somos polvo.
Pero a la misma vez, somos todo, piel, calor, caricias y dóciles maniobras para escabullirnos.
Me siento loca, viva y con miles de sonrisas, pero sé niño perdido,
que tienes más para darme, eso que reprimes y reclamo.
El tiempo no espera y las personas se cruzan en el subte, en la ciudad abierta, en la noche.
Volveremos a sentirnos, latiremos entre sudor y lágrimas.
Te pediré que te quedes como siempre... y ella será la excusa otra vez,
mientras juegas con mi pelo y me dices cuánto me quieres.
Ella será la excusa, cuando la única razón eres tú,
niño cobarde, sin ganas de amar, con muchas ganas de quedarte,
piel animal, instinto feroz. Vacío de amor, lleno de deseo.
Todo vuelve con el tiempo, y cuando el amor llegue a tu corazón,
esa niña que dejaste ir estará llena de anhelos, de ambiciones, de promesas,
escuchará otra voz, creerá en otras palabras y ya no tendrás lugar,
ya no podrás entrar, no te dejará tocarla, no la sentirás,
será tu corazón el que desangra....
Todo vuelve , y aún estás a tiempo.
Otero, María Belén.
Copyright 2010.
1 comentario:
Hola de verdad me encanto tu blog, no te imaginas cuanto bien me hizo leerlo y verlo. Gracias.
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