Tarareo

Te quiero, porque un frenesí bambolea por mis tambores palpitables.

Te quiero porque me haces decir mentiras piadosas, sonreír a escondidas 

y mirarte sin miedo a que descubras cuánto es lo que te quiero .

Sos mucho en mi vida, porque apareciste cuando ya no creía en nada.

Apareciste, o te hice aparecer.

Un milagro, una cancíón.

Un boceto en la estacíón.

Un fragmento pequeñito de la vida en su esplendor.

Un te quiero. 

Miles de caricias.

Algo de lo que soy.

Un tarareo sin pulso ni tempo.

Unos ojos de mar, escondidos entre las sábanas.

Unas ganas de encontrar, eso que ya creía perdido. 

Un tesoro sin llave, que estoy dispuesta a cuidar.

Un pirata sin parche, un disfraz para tirar. 

 Sos todo eso, y tiempo

mucho tiempo más.

( te quiero mucho)

Otero María Belén

Julio 2011

¿ QUIÉN PIERDE Y QUIÉN GANA?

Es bueno saber que no tenés ni el mínimo interés en intentar avanzar y  movernos, despacio, pero juntos. 
Escucharte por un rato, por tu prisa y tus nervios, calmó mi ansiedad de saber.
El saber porqué NUNCA vamos a ser el uno para otro, porque tu camino siempre busca esquivarme, y yo te atropello con mis diagonales. Te choco, me involucro, te sumerjo en un juego.
Un juego que hoy entendí que realmente NO TE INTERESA.
Esto va más allá de cansarse, de los años, de las vueltas que dimos y damos. 
Esto va en no querer.
Hoy gracias a tus ojos, entendí que no querías estar acá, que yo una vez más había dirigido el encuentro, yo había modificado nuestro destino, tu vida, "TU RUTINA".
Sólo para tenerte unos segundos. Quizás sólo fue un minuto. 
Me basta con escucharte hablar, con oler tu perfume particular. 
Me conforma quererte así. 
No me conforma que no me quieras. 


Es bueno saber que no vales la pena, que no vas a cambiar, que no tenés tiempo ni interés, es bueno saber que no tiene sentido dedicarte todos mis poemas, es bueno saber que en tu vida no hay lugar para una poeta más, no hay lugar para mí, es bueno darse cuenta que no me querés, que a lo mejor nunca me quisiste.
Pero no sé si eso cambie las cosas, no pude dejar de mirarte como siempre, no pude dejar de oler tu perfume de fresías, no pude no verte celestial, no pude dejar de sentirme llamada por tu piel, es bueno saber todo eso, fue bueno que me lo hayan dicho tus ojos.
Quizás algún día mi corazón también lo asimile como lo hizo mi cerebro esta tarde.
Pero no quiero mentirte, ni quiero que confundas esto con masoquismo.
Yo te quiero, aunque no quiera quererte.
No puedo arrancarte, aunque yo nunca haya sido parte de vos.
El amor, no tiene porqué ser recíproco.
No en mi caso.
No en mi historia de vida.
Sos el peor partido, el peor novio, el peor amigo, el peor empleado. 
y lo sabés.
todos lo saben.
Yo te amo.
con todo lo que soy, con todo lo que vos no sos.
Te amo, así, con tus pocas ganas, con tus miles de defectos,
con tus historias falsas, con tus incontables mentiras.
Vos podes no quererme, y podés llamarme tonta. 
Podés decirme lo que quieras.



Pero yo siento.
Yo amo, pienso, salto, bailo, me arriesgo, me entrego, confío sin pruebas, avanzo sin saber que hay después del siguiente paso.
y por eso me siento VIVA.
en cambio vos. VOS.
andás por la vida pasando el rato, matando el tiempo, envuelto en la rutina, sin apostar, sin ganas de intentar...vacío.






Y al fin de cuentas en esta historia...
 ¿QUIÉN PIERDE Y QUIÉN GANA?






Otero María Belén.
2011

Invisible

No me ves. 

Vos no ves, aunque millones de personas si lo hagan.

A vos no te importa nada de lo que me pasa, de lo que me motiva, de lo que me rodea.

No te interesa quién me mima, quién me cuida, quién me valora.

y yo por vos, me siento INVISIBLE.

Puedo estar rodeada de amor. 

Puedo estar saltando de felicidad.

Puedo olvidarte (si quisiera)

y acá me ves. (aunque así no sea)

Volviendo a vos, a tu imperfecto recuerdo.

Todo me lleva a buscarte.

Todas mis cosas te encuentran, sin mi permiso.

Todo se transporta en tu imagen.

y para vos soy INVISIBLE.

Yo te veo, te veo todo el tiempo.

Aunque no quiera verte.

Aunque pretenda no cruzarte.

Aunque tus canciones se esbocen en un papel inconcluso.

Te veo, te siento y te recuerdo.

Quizás cuando sea tu turno y abras los ojos.. puedas verme.

Dormida en tu pecho. Respirando tu aliento.

Quizás me valores.

Quizás me recuerdes.

Quizás entiendas mi ausencia y todo lo que no supiste darme, 

lo que no quisiste, por no verme.

Por hacerme invisible, cuando estaba presente, en alma y cuerpo.

Y tus lágrimas me regresarán a tu vida, como reflejo de lo etéreo, 

tu conciencia clavará espinas y mi rostro será una punzante marca en tu almohada.

No olvides lo volátiles que son las cosas sino las sabemos cuidar.

No olvides, que no se puede volver atrás...

cuando abras los ojos...

cuando puedas verme...

no olvides todo lo que no fuimos ni todo lo que quisiera que fuéramos.

Otero Ma. Belén